El 14 de junio de 2014 inició un sueño que fue superado por la realidad cuatro años después. Barranquilla 'batalló' por ser sede de los XXIII Juegos Centroamericanos y del Caribe, y estuvo más que a la altura. 

El camino de estas justas para la ciudad inició aquella fecha en Veracruz después de que meses antes la alcaldesa Elsa Noguera y el secretario de Deportes por ese entonces, Joao Herrera, anunciarán la candidatura. 

El talante de estas dos personas fue clave para que la sede haya sido asignada a la capital del Atlántico. Miembros de Odecabe visitaron a la ciudad antes de la fecha de designación y la avalaron como candidata. 

Les gustó el proyecto de construcción y remodelación de los escenarios, algo que fue ratificado al momento de anunciar a la ciudad como sede del evento centroamericano, venciendo en la puja a Ciudad de Panamá y Puerto La Cruz, Venezuela.

Empuje por los escenarios

Barranquilla tenía cuatro años para demostrarle al país y al mundo que podía realizar las mejores justas de la historia. Elsa Noguera abrió el camino para la llegada del gran ejecutor de las obras el actual Alcalde, Alejandro Char. 

El mandatario mantuvo a Joao Herrera en el cargo de secretario y en 2016 empezaría el empuje para construir los recintos deportivos. 

Las puesta en marcha de las obras sería liderada por el empuje del burgomaestre, quien colocó las primeras piedras del estadio de béisbol Édgar Rentería, el Romelio Martínez y el coliseo Elías Chegwin. 

Después llegaría el turno para los demás escenarios con el pasar de los meses. Cabe resaltar, que en las licitaciones y adjudicaciones de las obras tuvo un papel clave a secretaria General del Distrito, Ana María Aljure. 

La funcionaria fue destacada en varias ocasiones por Coldeportes y el Alcalde Char como la persona que agilizó todos los trámites para la ejecución de las obras. 

En el camino a los Juegos llegaría a la Secretaría de Recreación y Deportes, Gonzalo Baute, en reemplazo de Joao Herrera Olaya. El nuevo funcionario también fue clave para la consecución de las justas.

En cada visita del Alcalde a las obras estuvo a su lado. Fue un seguimiento constante para que se cumplieran los plazos.

Conteo regresivo e inversión

El 19 de julio de 2017, en la Plaza de la Paz de la ciudad, se llevó a cabo una ceremonia en la que los barranquilleros contaron a todo pulmón de 10 a 0 para que la cuenta regresiva de los Juegos Centroamericanos comenzara. 

El alcalde encargado ese día, Jaime Pumarejo, pidió a la ciudad mostrar "la mejor cara" en este evento, solicitud que se cumplió a cabalidad. 

En cuanto a la inversión en los Juegos, la Alcaldía le cumplió a Barranquilla, al país y las naciones que participaron.

Los escenarios fueron terminados en su totalidad después de inyectarle cerca de $500 mil millones, de los cuales el 72% fueron colocados por la administración y 28% por el Gobierno Nacional por medio de Coldeportes. 

El dinero invertido se vio en los escenarios, que fueron acondicionados de gran manera y cumplieron con los requisitos exigidos por la Odecabe, las Federaciones y el Comité Olímpico Internacional. 

Además el Distrito fortaleció las partes exteriores de los escenarios deportivos y sembró árboles alrededor de los recintos, en beneficio del medio ambiente. 

Los mejores Juegos

El primer escenario en ponerse en uso fue el Parque Raquetas, en 2018. Fue el epicentro de la Copa Davis, en el enfrentamiento entre Colombia y Brasil. 

Después llegaría el turno para el remodelado Romelio Martínez y el estadio de béisbol Édgar Rentería. A partir de estos eventos, Barranquilla empezó a respirar el ambiente centroamericano. 

Fueron la antesala de las justas, inauguradas de manera majestuosa el pasado 19 de julio, en el estadio Metropolitano Roberto Meléndez. 

La seguridad jugó un papel clave en estos Juegos. Bajo el liderazgo del Jefe de Seguridad y Convivencia Ciudadana Barranquilla, Yesid Turbay y la Policía Metropolitana, se brindaron todas las garantías para los actores principales del eventos. 

Un total de 1.470 policías llegaron de otras partes del país para brindar el apoyo a Barranquilla durante los Centroamericanos y del Caribe. 

Además de esto, la organización de los Juegos, encabezada por su director, Daniel Noguera, le brindó todas las comodidades a las delegaciones en la Villa Centroamericana, a los periodistas durante las competencias y los turistas que vinieron apoyar a sus países. 

También se debe destacar la labor de los 3.500 voluntarios apoyaron en la logística de los Juegos y la Liga Ciudadana, un grupo que promovió el cuidado de los escenarios deportivos.

La logística de los Juegos fue ejecutada por la Alcaldía de Barranquilla, ya que los prometidos $30 mil millones, por parte del Presidente Juan Manuel Santos, nunca llegaron y la administración tuvo que asumir este reto. 

Sin duda alguna, Barranquilla se sobró y le cumplió a todos los protagonistas, dejando claro que fueron los mejores Juegos Centroamericano y del Caribe de la historia.